La mejor opción es pensar que en lugar de mejor o peor, en realidad, se trata de diferentes grados de evolución y que el camino de cada uno es personal y variable, por tanto, lo que hoy es de un modo, mañana puede cambiar pues todo es transitorio y estamos de paso, por eso, si hemos desarrollado el desapego y la aceptación de las circunstancias, más entregados estaremos a la misión de nuestra alma y, por tanto, más profundizaremos en el mejor aprendizaje: el de nosotros mismos, aquél que nos habla desde el silencio, la intuición y certeza que nos otorga la sabiduría interior. En esta sabiduría reside la auténtica magia de la vida porque nos conecta con el ser, aquello que somos en esencia y que estamos destinados a conocer y experimentar.
Un espacio con mis ilustraciones donde confluyen pensamientos y emociones que se abren paso en ese remanso de quietud que permanece sereno en nuestros corazones...
miércoles, 18 de mayo de 2011
Mirar lo ajeno
La mejor opción es pensar que en lugar de mejor o peor, en realidad, se trata de diferentes grados de evolución y que el camino de cada uno es personal y variable, por tanto, lo que hoy es de un modo, mañana puede cambiar pues todo es transitorio y estamos de paso, por eso, si hemos desarrollado el desapego y la aceptación de las circunstancias, más entregados estaremos a la misión de nuestra alma y, por tanto, más profundizaremos en el mejor aprendizaje: el de nosotros mismos, aquél que nos habla desde el silencio, la intuición y certeza que nos otorga la sabiduría interior. En esta sabiduría reside la auténtica magia de la vida porque nos conecta con el ser, aquello que somos en esencia y que estamos destinados a conocer y experimentar.
martes, 10 de mayo de 2011
La confusión
La mejor manera de luchar con la confusión es calmar la mente y buscar el silencio interior con técnicas como el yoga, la meditación o similares que nos ayuden a encontrar la confianza y la paz en nosotros mismos y en la vida. Escucharnos a nosotros mismos y encontrar el tiempo para detenernos también nos ayudará.
Cuando la mente está en calma es el alma quien nos habla y no la mente egótica por lo que el camino a seguir se descifrará y la claridad mental sobrevendrá. Sin embargo, es necesario darse tiempo para abrirse al proceso de reencuentro con uno mismo y de darse permiso para ser conscientes que somos seres de luz y que la luz interior se abrirá paso, si escuchamos los designios del corazón, aprendemos a dejarnos llevar por la intuición y a descubrir quienes somos, precisamente, para dedicarnos a ser y a desarrollar la misión del alma.